Prepararemos esta mermelada, teniendo en cuenta de que las cantidades de los ingredientes, son siempre por cada kilo de fruta deshuesada.
Una vez lavados y secados los albaricoques, los partiremos por la mitad, retirándoles el hueso.
Los pondremos en una cazuela con el agua, dejándolos cocer, a fuego suave, durante unos 20 minutos o hasta que estén blandos, ya que cuando les agregamos el azúcar, si no lo están, no se reblandecen más. Agregaremos el azúcar y cuando se haya disuelto, añadiremos el zumo de limón, continuando la cocción, a fuego vivo, mezclando y aplastando los albaricoques, durante 40 minutos, sin dejar de remover.
Para saber si ya está lista, al remover con la espátula, la mezcla deberá resultar consistente y se ve el fondo de la cazuela.
Podemos consumirla una vez esté fría o envasarla en botes esterilizados.
Si en lugar de mermelada queremos hacer confitura, la diferencia que hay, es que la confitura es más dulce, emplearemos 1 kg. de azúcar por kilo de fruta, dándole una segunda cocción cuando la primera se haya enfriado.
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Hoy he hecho mermelada de albaricoque, pero le he añadido un chorrito de licor de peras casero.