En un mortero, machacaremos unos trozos de pan frito junto con los ajos, añadiendo 1 chorrito de vinagre y 1 vasito de agua, sazonándolo con sal.
Pondremos los espárragos trigueros en una cazuela individual de barro, rociándolos con la preparación anterior. Cascaremos un huevo encima, procurando que no se rompa la yema, y le agaregaremos el jamón cortado en trocitos.
La introduciremos en el horno precalentado a 240º C. durante unos 7 minutos, procurando que la yema quede blanda.
Servir de inmediato.
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