Pelaremos y cortaremos las patatas en dados.
Pelaremos y cortaremos en aros, las cebollas y las doraremos en una cazuela con aceite de oliva. Una vez doradas, incorporaremos las patatas, removiéndolas y dejándolas cocer, durante 10 minutos. Verteremos el vino blanco, dejándolo evaporar. Agregaremos la salsa de tomate, las hojas de salvia y el pimentón, sazonándolas con sal. Bajaremos el fuego y las dejaremos cocer, tapadas, hasta que las patatas estén en su punto, unos 12 minutos, removiéndolas de vez en cuando. Si hiciese falta, añadiremos un poco de agua hirviendo.
Servir calientes.
Nuestra selección de vinos:
Solo es una cuestión de gustos...
«El vino mueve la primavera, / crece como una planta la alegría. Caen muros, peñascos, / se cierran los abismos, / nace el canto.» Pablo Neruda, Oda al Vino.
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