Picaremos finamente la cebolla y los dientes de ajo, rehogándolos en una cazuela grande, baja con un poco de aceite de oliva, a fuego suave, hasta que estén transparentes.
Pelaremos y cortaremos las patatas, agregándolas a la cazuela junto con las setas de calabaza (ceps) troceadas y un trozo de trufa en daditos, sazonándolo todo con sal, rehogándolo todo ligeramente. Verteremos el vino blanco, dejándolo cocer, durante 12 minutos. Lo espolvorearemos con perejil picado. Cascaremos 4 huevos sobre la cazuela y la introduciremos en el horno precalentado a 200º C. durante 3 minutos.
Retiraremos la cazuela del horno y la decoraremos con unas láminas de trufa y con el resto de élla, la picaremos finamente, espolvoreándola por encima.
Servir de inmediato.
Nuestra selección de vinos:
Solo es una cuestión de gustos...
«El vino, mientras más se envejece, más calor tiene: al contrario de nuestra naturaleza, que mientras más vive, más se va enfriando.» Félix Lope de Vega y Carpio.
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