Cortaremos 4 hojas de papel de aluminio, con las que podamos envolver las rodajas de salmón. Salpimentaremos el salmón.
Colocaremos las rodajas en el centro del papel de aluminio y las regaremos con la mantequilla fundida. Verteremos 1 chorrito de vino blanco, sobre cada rodaja y repartiremos bien las especias por ambos lados, el perejil, la albahaca y el estragón, picados. Cerraremos el papel de aluminio y las colocaremos en una bandeja de horno.
Las introduciremos en el horno precalentado a 220º C. durante unos 25 minutos.
Mientras, coceremos unas patatas pequeñas, bien lavadas, enteras y sin pelar. Una vez cocidas, las pelaremos y colocaremos sobre una fuente, espolvoreándolas con perejil picado.
Serviremos las rodajas de salmón acompañadas con las patatas.
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